Mirar por la ventana


Esta tarde, madrugada o noche, date tiempo y mira por la ventana ¿Qué ves?, ¿que hay allí afuera?….,  mas allá de la ventana existen otras realidades, días que al pasar dejan marcas en el atardecer, cada instante que pasa deja una huella atrás, una señal  ¿la oyes? ¿La puedes leer?, la cotidianidad y el ritmo apacible de la rutina  la han borrado, y solo quedan ecos, mitos perdidos que ahora se dejan entrever, detrás de todo lo que vemos o creemos ver se esconden nuevos mundos, no has notado que ver el cielo azul en si es un acto que nos lleva a no prescindir de lo bello que entrega esta vida, cosas tan simples como tomar mas tiempo para vernos frente al espejo nos hace sentir que es lo que llevamos por dentro, en realidad es ese reflejo de cómo somos como personas y para darnos cuenta que de esa forma nos presentamos  frente a otros, saber que detrás de cada detalle  hay una función especifica que pretende hacer ese “clic” en nuestra cabeza que es saber y estar conciente que como vemos las situaciones, condicionamos las mismas para un fin especifico, saber que somos dueños de ellas, todo acto de pensamiento es aun mas fuerte que la acción misma por eso es útil saber que somos dueños de querer eligir, incluso ignorando ciertos criterios, por eso el tener pensamientos positivos nos aliviana la carga, démonos un relajo y miremos…  

Mas allá de la ventana hay posibilidades de poder cambiar lo repetitivo por algo mejor, aventurémonos, abrir la imaginación es un ejercicio fiable, despejar la mente de preocupaciones, descubrir nuevas realidades, vivir situaciones diferentes nos invitan a abrir más nuestra conciencia, percibir es la palabra clave, no darnos al escepticismo que con ello se pierde toda posibilidad, debemos ser y creernos exploradores, como faros buscadores encontrar algún sentido a todo esto, sin miedo a oir esa voz interna, démonos el derecho de ver y saber quienes somos realmente.